Si tiene la opción, es mejor que su hijo nazca por parto vaginal que por cesárea. Si está embarazada es bueno que consuma alimentos ricos en prebioticos y probióticos (un ejemplo excelente es el chucrut crudo), Que evite los antibióticos en lo posible y que evite las amalgamas en su boca.
No esterilice todo lo que tenga contacto con su hijo.
Dentro de lo posible dé pecho materno exclusivo a su hijo los primeros cinco meses. Es ideal evitar la fórmula de leche en bebes pequeños, incluso una gota como recién nacido, les puede generar una alergia a la proteína de leche de vaca posteriormente.
Deje que juegue en la tierra, en el barro, que trepe árboles, que explore, que se rasguñe y se lastime un poco. Hay que saber proteger en la medida justa, sin sobreproteger.
Lleve una vida muy rítmica con horarios muy claros y ordenados. A su vez el niño necesita conocer límites muy claros, lo que no significa enojarse con él. Siempre combinar un modo tranquilo y amoroso con máxima claridad en los límites.
En este sentido también corresponde el hacer rutinas muy claras, por ejemplo en la noche: según la edad del niño, cuento, oración y aplicar aceite por ej. de caléndula con suaves masajes en el cuerpo.
No le baje la fiebre a su hijo, cuando éste tenga fiebre. La fiebre es un mecanismo de defensa y además es una tendencia aguda, que es contraria a la tendencia crónica, fría, como son las alergias. No use antipiréticos.
Exponga a su hijo lo más que se pueda a un ámbito de naturaleza, lo más parecido posible al campo.
Que tenga mucho contacto con niños, ya sean hermanos idealmente y sino, niños de la sala cuna o del jardín infantil.
En lo posible que el niño consuma alimentos ricos en prebioticos y en probióticos: menores de un año: leche materna; mayores de un año: fruta, verduras, cereales integrales, semillas y productos fermentados como el chucrut crudo.
Si su hijo toma pecho, introduzca los cereales con gluten mientras esté tomando pecho aún. Esto es un factor protector contra la enfermedad celíaca.
Proporcione a su hijo desafíos a su medida. No le de todo hecho ni le evite todas las dificultades. Él se fortalecerá en todo sentido si puede desplegar sus capacidades enfrentándose a problemas que él pueda resolver.
Trate de evitar vacunas que tengan hidróxido de aluminio o úselas lo menos posible.
Ese ideal iniciar el esquema clásico de vacunación al menos dos meses más tarde de lo que se indica habitualmente.
Trate de evitar el consumo de antibióticos, cuando no sea estrictamente necesario, especialmente si su hijo tiene menos de un año de vida.
Que su hijo consuma frutas y verduras orgánicas o biodinámicas, idealmente que no provengan de semillas híbridas. Si toma leche de vaca, idealmente que sea leche lo más natural y menos procesada posible (en Sudamérica, sugiero hervir la leche que se obtiene de ordeñar la vaca, ya que no se puede estar seguro de la salud de la vaca).
Carina Vaca Zeller
pediatra
